viernes, 7 de septiembre de 2012

La prima de riesgo incita a la exageración



La sociedad global está marcada por grandes lemas y golpes de efecto. En lo positivo y también en lo negativo. Como ejemplo patente, la insistente prima de riesgo, que se instaló en nuestras vidas con la crisis y amenaza con permanecer durante mucho tiempo. Y es que esos intereses que pagamos los españoles, para sostener lo que nos queda de Estado del bienestar, provocan tantos sobresaltos como metáforas exageradas.
 
Hoy, sin ir más lejos, “el salvavidas diseñado por el Banco Central Europeo”, según indicaba El País, “para aliviar la presión sobre la deuda soberana”, ha sido interpretado de esta manera por El Confidencial.com: “Súper Mario –Draghi, el presidente del BCE– obra el milagro: hunde la prima 150 puntos y sale de la zona de máximo peligro”. 

Pero la exageración no es exclusiva de este periódico digital, ni mucho menos. Así, mientras que en la página web de RTVE se podía leer que “la presión sobre la deuda cae en picado”, La Verdad titulaba: “La prima se desploma por debajo de los 420 puntos”. 

Los intereses que los españoles tenemos que pagar de más, con respecto al bono alemán, por culpa de nuestra economía en crisis, se han tornado en una especie de monstruo que amenaza con devorarnos. De ahí, que El País respirara esta mañana al subrayar: “La prima cae otros 30 puntos por el plan para frenar el acoso a la deuda”. Por su parte, La Razón recuperaba el resuello y titulaba: “Draghi insufla oxígeno al acordar la compra de deuda”.

¿La expresión excesiva es nueva para hablar de los vaivenes de la prima de riesgo? Negativo. No hay más que ver lo que se titulaba en situaciones radicalmente contrarias. Expansión, sin ir más lejos, destacaba el 20 de julio: “La prima rompe sus máximos históricos”. Una exposición muy contenida, en comparación con el siguiente titular aparecido, el 3 de agosto, en Diario de Teruel: “El BCE se cruza de brazos, la prima se desboca y la Bolsa se estrella”. Asimismo, en la web de La Sexta Noticias podíamos leer, el 1 de junio, que los españoles estábamos “asfixiados por la prima de riesgo”.

Tras bordear el apocalipsis –y ver artículos como el publicado por Pilar Rahola en el portal Radical.es donde afirmaba que “la prima de riesgo enloquece”–, este titular de La Razón podría parecer un juego de niños: “La prima se dispara hasta los 552”. Fue publicado el 1 de septiembre, hace una semana. Y es que la soga al cuello, de momento, se ha aflojado. ¿Hasta cuándo?

No hay comentarios:

Publicar un comentario