Qué gran invento el de La
Roja, para evitar que algunos jugadores hablen de la incómoda Selección
Española. Y qué enorme lapsus el de Markel Susaeta, cachorro del Athlétic
de Bilbao, quien no tuvo otra ocurrencia que referirse a ‘la Cosa’.
¿Se le olvidó decir ‘un
país’, ‘un equipo’, ‘una sociedad’? Con lo elegante que hubiera resultado
afirmar, tan solemne como el más que probable lehendakari, Íñigo
Urkullu: “Representamos a un conglomerado de nacionalidades, que aúna todas
las sensibilidades”. Ya puestos.
Habrá que echarle un capote
al jugador de Éibar, puesto que la de ayer era su primera comparecencia
ante la prensa como internacional, una vez convocado por Vicente del Bosque
para el partido de hoy frente a Panamá.
Pero también hay que decirle
que antes de acordarse de ‘la Cosa’ podría haberse referido a la Selección
como ‘el equipo de Casillas y Xavi’ o ‘el vigente Campeón de
Europa y del Mundo’. Y por qué no, hubiera sido más
políticamente correcto hablar del ‘grupo’, esa expresión tan de moda y
que ya aburre de tanto oírsela a futbolistas y entrenadores.
Todo sea por no hablar de este
país llamado España cuyos equipos, según la terminología del presidente
del Barça, Sandro Rosell, podrían jugar todos juntos –una vez se
independice Cataluña– en ‘la Liga Ibérica’ o ‘Liga de
Fútbol Profesional’. Cualquier ocurrencia con tal de no hablar de ‘España’.
Precisamente, la Selección
Catalana de Fútbol presentó –el mismo día que Susaeta
acuñó ‘la Cosa’– un uniforme cuando menos peculiar, diseñado por Custo Dalmau.
La zamarra, según leemos en La Vanguardia, “de la marca Astore,
representa al dragón de
Sant Jordi y será la equipación oficial que luzcan la selecció,
los equipos de base y la selección de fútbol sala”.
Pues bien, el uniforme de ‘la Cosa catalana’ no ha
tenido mucho éxito entre los aficionados, a juzgar por un sondeo realizado en
la página web del diario barcelonés. Y es que nada menos que un 79% de los
internautas que habían respondido a la encuesta –al filo de la media noche–
mostraron su disgusto.
La información de ‘la Cosa Española’, eso sí, quedaba
relegada a un segundo plano en La Vanguardia digital y del lapsus de Susaeta
–por cierto, bien destacado en los diarios de Madrid–, ni rastro.
A los lectores de El
Periódico tampoco les gusta ‘la Cosa Catalana’. El rechazo –casi idéntico
al constatado en La Vanguardia– se podría resumir con el comentario más
valorado entre los lectores del diario del Grupo
Z: “Supongo
que en vez de botas, jugarán con espardenyas. Le viene bien a tanta imaginación”.
Y es que hay que ver cómo están ‘las cosas’
en este antiguo país llamado España, hoy con huelga general incluida.
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