jueves, 17 de enero de 2013

Hagamos un concurso de ideas para cambiarle el nombre a España


Televisión Española está empeñada en rebautizar a la Selección Española de Balonmano como ‘Los Hispanos’. A fuerza de machacarlo –ya se sabe lo que decía el nazi Goebbels de que algo repetido mil veces se convertía en dogma de fe– vamos a terminar creyendo que nuestros equipos deportivos representan a una especie de Confederación de Estados Independientes, al estilo de la Guerra de las Galaxias.
 
Después de La Roja –que inauguró Luis Aragonés y ha alcanzado la cima con Vicente Del Bosque– llegaron ‘Las Guerreras’ del equipo nacional de balonmano femenino. Así, no es de extrañar que Sandro Rosell, el presidente del Barça, esté convencido de que, en una Cataluña independiente, Messi y sus compañeros jugarían en la Liga Ibérica. Aunque no sabemos si con portugueses o sin ellos. Pero, claro, un detalle como éste debe ser insignificante para un nacionalista. 

Y hay que ver lo que le sigue costando a muchos pronunciar las palabras España, español y española dentro de su propio país, porque ni los propios filólogos defienden la lengua patria. 

No hay más que consultar un reciente compendio, publicado por la Fundación del Español Urgente –precisamente– para leer que “es preferible utilizar castellano para referirse al modo de expresión utilizado en España”. Así, se diferencia “de las lenguas de determinadas comunidades autónomas”. Pero, claro, un argentino o un boliviano sí pueden proclamar con orgullo que hablan español. Es lo que hay. 

Y es que a nuestra clase política, desde la absurda atalaya de sus Reinos de Taifas, se le llena la boca cuando habla de potenciar la Marca España. Pero, a la hora de la verdad, cada uno hace la guerra por su cuenta. Y llegamos a absurdos como el partido que enfrentó en un torneo de baloncesto femenino, disputado en diciembre, a las selecciones sub 18 de España y Euskadi. 

Teniendo en cuenta que al equipo masculino que ganó la medalla de plata olímpica se le rebautizó hace unos años como la ÑBA, poco puede sorprendernos. Pues nada, que Rajoy convoque un concurso de ideas para cambiarle el nombre a España. Pero que tenga más éxito que Aznar con la letra del himno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario