Los asuntos controvertidos,
y el de la política de empresa de Ryanair lo es, dan mucho juego. No hay más
que echar un vistazo a los titulares de la prensa española tras la rueda de
prensa ofrecida el pasado día 24 por el presidente de la compañía irlandesa,
Michael O’Leary, para exponer su versión acerca de los tres vuelos que
aterrizaron de emergencia en el aeropuerto de Manises, en Valencia, el 16 de
julio.
Mientras que El Confidencial.com titulaba su
información indicando aquella triple situación de peligro ha dado “mucha
publicidad” a la compañía de low cost y Levante
concretaba más, destacando que Ryanair “vende más tras los aterrizajes de
Manises”, otros medios de comunicación hacían sus particulares
interpretaciones. Así, para El Mundo
lo más reseñable era que, según O’Leary, España “no puede” multar a la compañía
“por motivos de seguridad”. Con este periódico madrileño coincidía ABC, que recogía unas manifestaciones
del presidente de Ryanair afirmando: “El Gobierno español no puede hacer nada
contra nosotros”. Este aspecto de la rueda de prensa, convocada por la compañía
para salir al paso de las críticas aparecidas en los medios de comunicación
españoles hacia sus prácticas comerciales y corporativas, también fue el elegido
como preferente para otros periódicos como El
Ideal de Granada y Las Provincias
(“España no nos puede sancionar”). Incluso El
Ideal Gallego afinaba en su titular, indicando: “Ryanair dice que la
investigación la hace Irlanda y España sólo colabora”.
Al margen de quién o no
puede sancionar a la compañía aérea, otros medios pusieron la mirilla en el
Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA). Como resultado, La Vanguardia titulaba que Ryanair
anunció una “demanda contra SEPLA”. Se trataba de la misma línea argumental de
la agencia EFE, quien hablaba de
“acciones legales contra el SEPLA”. Antena
3 Televisión precisaba más y subrayaba que el anuncio de demanda sería “por
difamación”.
Ryanair, aerolínea que
suscita amores por doquier –a juzgar por su cuota de mercado– y odios –no hay
más que pasearse por los periódicos y redes sociales–, tenía que ofrecer más
titulares. Así, El Periódico de Cataluña
llamaba la atención de sus lectores con un curioso titular: “…los controladores
de Madrid”. Sin duda, el más original de toda la prensa española. Pero, hay
más. Por ejemplo, La Información resaltaba que “Ryanair dice
que sus aviones cumplen con la seguridad”, mientras que en Atlántico se titulaba lo siguiente: “Ryanair asegura que los
aterrizajes forzosos cumplían con los procedimientos se seguridad de la UE”. El País, también buscando un enfoque
diferente, abría su información acerca de la rueda de prensa del presidente de
Ryanair recogiendo una frase de éste: “El avión muy cargado de combustible
afecta a la seguridad”.
Como quiera que el
presidente de la aerolínea apuntó en varias direcciones, la televisión
autonómica valenciana, Canal 9,
resumía su información indicando que O’Leary “anuncia una campaña de
desprestigio contra Ryanair”.
Son, todo ello, diferentes
visiones de la polémica.
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